19 Sep ¿Y yo? ¿Soy un Social Media Manager o un Community Manager?
Facebook, Twitter, Instagram, Youtube… No importa su público objetivo, su finalidad o su tiempo de vida. La continua e irrefrenable proliferación de redes sociales trae consigo la aparición de nuevos perfiles profesionales en cualquier tipo de organización. Aunque la falta de regulación de los estudios es innegable, lo cierto es que no son pocos, precisamente, los cursos que se ofertan, algunos con más o menos éxito y acierto. Por supuesto, basta un paseo por una red social profesional, como LinkedIn, para observar que esa persona que antes se dedicaba a otro sector, ahora se encuentra enfocado al mundo del social media. ¿A qué se debe?
>>Descarga gratis el e-book sobre cómo sacar rendimiento a tu empresa con Facebook<<
Lo que comenzó con la figura del Community Manager, ha evolucionado hasta límites insospechados. Incluso los más involucrados con la materia tienen algunos problemas para identificar estas nuevas profesiones. Conozcamos las más importantes.
Community Manager
Aunque su función más conocida es el trato con el cliente a través de las redes sociales —atención al mismo, resolución de incidencias, dinamizador de conversaciones…—, y semeja pasar 24 horas colgado de la pantalla del ordenador, lo cierto es que el CM es mucho más.
El Community Manager construye, gestiona y administra una comunidad online, incrementando el valor de la marca, captando nuevos clientes y consiguiendo una relación estable con los asiduos.
Este se encarga de crear y curar los contenidos que podemos consultar en cualquier blog —dependiendo de la empresa, no son pocas las ocasiones en las que debe hacerse un experto en diversas materias en función del número de compañías para las que trabaje, como en el caso de las agencias—. Además de ello, debe publicarlos en redes, promocionarlos, difundirlos, programarlos para las mejores horas…
Parece sencillo, pero el objetivo clave reside en conseguir conversiones a la página web que, a su vez, pasa por crear una comunidad que interactúe. En resumen, es el que ejecuta la estrategia de contenidos digital; el lazo de unión entre la compañía para la que trabaja y el consumidor, velando siempre por mantener e incrementar la reputación de la primera.
Habilidades
Pese a la creencia popular de que cualquier persona con pasión por las redes sociales puede realizar estos cometidos, lo cierto es que se precisa de conocimientos en redacción —se suele hablar de personas con estudios en periodismo o filología, acompañados de másteres y/o posgrados—, diseño de estrategias, monitorización y análisis de los resultados de cada publicación, SEO y SEM…
En el día a día de este profesional no puede faltar el uso del Photoshop, del Word, del Excel, programas de analítica web… Además, debe contar con habilidades de comunicación, empatía y escucha activa, saber utilizar el tono adecuado en cada ocasión, etc. Un/a verdadero/a hombre/mujer orquesta.
Social Media Manager
La diferencia principal con la anterior figura radica en que el Social Media Manager suele tener presencia en corporaciones grandes, donde es necesario establecer un coordinador del equipo de Marketing Digital. Es aquí donde surge este perfil. Sin embargo, no son pocas las ocasiones en las que un CM realiza, sin saberlo, funciones de este. Alguien debe analizar los resultados obtenidos y, ese alguien, es, por supuesto, el Social Media Manager.
Grosso modo, este profesional de las nuevas tecnologías se encarga de coordinar y supervisar a todo el equipo de Community Managers existente, cubriéndolos bajo el mismo paraguas. Sería lo que en el mundo empresarial tradicional se ha denominado siempre encargado o responsable de área.
Sus tareas van más allá de generar contenido e interactuar con la audiencia. Suya es la labor de establecer objetivos, implementar un plan de acción social, coordinarlo. Así, se encarga de generar estrategias y monitorizarlas; de recoger, analizar e interpretar todos los datos.
Hablamos del responsable de tomar todas las decisiones que se sitúen en un nivel estratégico. Suya será la decisión de en qué redes sociales se tendrá presencia —cuáles serán las plataformas elegidas para la estrategia de Marketing Digital—, el plan de Social Media de la empresa, el establecimiento del calendario de publicaciones, el estilo de las mismas, la administración de los presupuestos de cada campaña, etc.
Habilidades
Posee un carácter eminentemente analista, ya que su trabajo se basa, fundamentalmente, en analizar los resultados obtenidos de cada acción llevada a cabo. Por ello, es fundamental que controle KPI’s —indicadores claves de rendimiento—.
Debe tener madera de líder y saber tomar decisiones, no dejándose bloquear por la incertidumbre o el miedo. No solo conoce minuciosamente el funcionamiento de cada plataforma, sino que posee también nociones de administración y publicidad. Para hacer la explicación más sencilla, nos referiríamos a un Community Manager en sí mismo, acompañado de conocimientos analíticos y estratégicos.
Y la diferencia entonces está en…
En resumen, el CM posee un perfil operativo, poniendo en práctica todas las acciones; el SMM, estratégico, planificando, como el propio término indica, la estrategia.
Planificación y ejecución, un ensamblaje que debe ser perfecto.
Sin embargo, las profesiones y los conceptos del Social Media Manager y del Community Manager convergen en un punto de no retorno, originando tantas profesiones y nuevos roles como podamos imaginar. Por supuesto, no nos hemos olvidado —ni dejaremos en el aire— estas.
Permanece atento a próximas entradas para conocer las características de cada uno de los perfiles. Mientras, te invitamos a que te hagas con el siguiente e-book gratuito para sacar el máximo partido a tu empresa gracias a Facebook.